Orientarse con mapas mientras cuidas la montaña
Orientarse en la montaña, requiere de ganas de aprender, de un buen mapa y sobre todo de realizar muchas excursiones. Lo primero que debemos saber es cómo orientar el propio mapa, para ello el uso de la brújula es ideal. Si no tenemos una, podemos triangular nuestra posición, es decir, buscar tres lugares que reconozcamos y ver si estamos dentro del triángulo imaginario que forman. Por ejemplo. Si tenemos un lago delante, un pico muy icónico a nuestra derecha y a la izquierda tenemos alguna carretera o población, podemos identificar en qué sector del mapa estamos. Detallando si estamos más cerca del lago o de la carretera, deberíamos saber ubicar el Norte, Este, Oeste y Sur. Ponemos el mapa en la posición que coincida el lago con su proyección y el resto de las ubicaciones. Tenemos otras formas de posicionar el Norte y con ello colocar el mapa en la posición correcta. Desde métodos de fortuna, con el sol, brújulas caseras y otros métodos creativos. Una vez tengamos el mapa colocado enfocado al sector correcto, podemos estimar qué tenemos delante, cómo abordar la ruta e intentar ver los hitos del camino desde nuestra posición.
Cómo cuidar la montaña
Cuidar la montaña empieza cuidándote a ti mismo, para evitar movilizar equipos de emergencia, evitar sustos y accidentes. Hay que ser previsor y anticiparse, contar con un botiquín equipado, un mapa, prendas de calidad y un calzado acorde a la actividad. El segundo paso, sería ser consciente de nuestra huella, tanto en la compra de los materiales, como en nuestras actividades más hostiles. Evitando el empleo de instalaciones innecesarias, o dejar basura y residuos. Debemos intentar priorizar el uso de prendas y productos realizados de manera sostenible, con materiales reciclados y reciclables. Pensar en el consumo responsable, como la startup aragonesa M.UP! mapas de tela, que, a partir del diseño de mapas textiles confeccionados en r-PET (Polietileno tereftalato), es decir, plástico PET reciclado, ayudan a reducir los residuos plásticos. Al mismo tiempo que consiguen aumentar el ciclo de vida del producto. Como consejo extra y más para las salidas de este otoño, se debería intentar disminuir el uso del camping gas, vamos a guardarlo para el invierno o para las noches más frías de otoño. Ya no solo por el consumo energético de la materia prima que es mínimo, sino más bien por la bombona que en la mayoría de los casos no son reutilizables y forman un residuo considerable.
Cómo cuidar los mapas de tela
Por los mapas de tela con los que Trangoworld colabora, no te preocupes, se cuidan solos. Están diseñados no solo para ser reciclados en el futuro, pensando en el largo plazo. Sino para que los puedas llevar a la montaña y tratar cómo tú quieras, con la finalidad de orientarte de forma cómoda y segura. Además, con ellos estás ayudando a que se reciclen materias que de otro modo hubieran terminado en los océanos o en los vertederos locales. Este otoño es la oportunidad perfecta para seguir cuidando nuestros ibones, lagos, picos y valles. ¡Cogiendo fuerzas para un inverno que parece que viene fuerte! M.UP!